Pertinencia, vinculación con la realidad regional y desarrollo local. Esos fueron algunos de los términos que más se plantearon en el Seminario de Programas Académicos organizado por la Universidad de Aysén, evento en el que académicos e investigadores del nuevo plantel estatal y de la Casa de Bello –institución tutora-, se reunieron para dialogar y definir las estrategias para el diseño de carreras 2017 – 2019.
En el encuentro, que se desarrolló entre el 13 y el 15 de abril en Coyhaique y en la localidad de Cerro Castillo, se analizaron las cinco áreas del programa académico de la Universidad de Aysén, que son recursos naturales, ingeniería, educación, salud y ciencias sociales; cuyas carreras se anunciarán el 5 de mayo.
“En todos los informes de las áreas del programa académico fue muy bien valorado el rol de asociación de la U. de Aysén con la U. de Chile”, señaló la directora de Pregrado, Leonor Armanet, quien destacó además “el rol de acompañamiento que nos motiva a estar muy cerca de las dos nuevas universidades estatales”, el que explicó, se ha desarrollado desde el conocimiento y experiencia de la Casa de Bello, desde una “mirada muy respetuosa de las decisiones propias de la nueva universidad”.
Entre los puntos de este proceso destacados por Armanet se encuentra el carácter participativo que ha tenido y el planteamiento de la institución como universidad compleja, lo que “habla de una forma de ver una institución que se debe al país y por lo tanto tiene como mandato generar conocimiento nuevo, de alto nivel y muy científicamente elaborado, aparte de formar a los mejores profesionales en las áreas que en este caso la universidad defina”.
Sobre esto último, la rectora de la Universidad de Aysén, Roxana Pey, explicó que en el proceso de creación de este nuevo plantel “hemos enfatizado que nuestro modelo de universidad tiene un concepto de calidad estrechamente vinculado con la investigación y con la vinculación con el medio y de pertinencia regional”.
“Hemos tenido la participación de destacados profesionales locales de la región y el acompañamiento de la Universidad de Chile, que ha sido un apoyo muy importante”, agregó la rectora Pey sobre el modelo educativo definido en este proceso, el que fue concebido con una mirada a mediano y largo plazo. “Una cosa es qué carreras vamos a abrir el 2017 pero tenemos que pensar cómo se articulan con las que vamos a abrir el 2018, 2019 y el 2020. Estamos pensando todo eso en conjunto y para que cuando anunciemos nuestras carreras el 2017, los estudiantes sepan que van a entrar a un ciclo común y que van a poder, al siguiente año, explorar más posibilidades. Lo que nos importa es hacerlo con muy buena calidad, con mucha pertinencia, buscando los intereses de los estudiantes y abriendo esas flexibilidad, esa movilidad estudiantil que nos permita vincularnos con el resto del sistema”, dijo.
La comitiva de la Casa de Bello que participó de este encuentro estuvo integrada además por los académicos Gabriela Rubilar y María Elena Acuña de la Facultad de Ciencias Sociales; por Julio Lira, de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas; Roxana Lara de la Facultad de Medicina; Sara Chauriye de la Iniciativa Bicentenario Juan Gómez Millas; y Antonia Rozas, de la Vicerrectoría de Asuntos Académicos.
En el del Seminario participó además Francisco Durán, en representación de la División de Educación Superior del Mineduc, quien se refirió a los desafíos que implica la creación de carreras en el marco de la reforma a la educación superior; y Mariana González, encargada de estudios del CRUCH, quien ofreció una charla respecto a las tendencias de las carreras de los planteles que son parte del Consejo de Rectores.